"La Historia es una casa de muchas habitaciones." Fernand Braudel.

"La Historia es una casa de muchas habitaciones." Fernand Braudel.

Y mi corazón está en el sur del sur, con tizne negro, en la cancha, en el bondi, en el chori, en la fiesta en la calle, en la murga, en el tambor, en la bandera, en mi doble ciudad...y en el camino, en el tren, en la frontera parada sobre la línea, en el andén, conectando dos mundos iguales pero disímiles.

La Plata - Ringuelet - Gonnet - City Bell - V.Elisa - Pereyra - Hudson - Plátanos - Berazategui - Ezpeleta - Quilmes - Bernal - Don Bosco - Wilde - V.Domínico - Sarandí - Avellaneda (combinación) Gerli - Lanús

Arraigo


No quiero cruzar la frontera, es más quiero retroceder al corazón de mi tierra. No quiero que vengas, ni quiero saludarte desde el límite de mi mundo contiguo al tuyo. Mejor así.Mejor distancia, y no me conquistes. Ni el corazón, ni el cuerpo. No vengas a vencerme, ni vencido.No quiero pasar la frontera aunque me aceptes, no me importa cuanto más me parezco a vos que a los de adentro. Yo no soy de tu mundo, no es ésta mi pertenencia.
Demasiado lanusense para La Plata, demasiado platense para Lanús.Haciendo equilibrio sobre la línea de frontera, mi verdadera identidad camina bien.
Y si bajo de mi tren camino por el torcido diagonal hasta el lugar que más se parece a mi tierra andante. Otra vez en la frontera cayendo del cuadrado, ni un lugar ni otro.Siempre en un tercer lugar, pero nunca neutral.

viernes, 24 de febrero de 2012

La expresión Naiff

Encontrar la media naranja. Cuestión difícil y por demás azarosa para mi gusto.
Prefiero pensar que no soy una fruta incompleta, más bien me interesa ser un todo en construcción. Que muta.
Si fuera una media naranja, además de faltarme mi equivalente invertido, sería siempre igual: la mitad de una cosa definida. Por otra parte, y más allá de la dificultad, esta búsqueda estaría orientada a encontrar un otro que 'encaje' completamente conmigo, en espejo como 'dos gotas de agua' o 'dos almas gemelas'...ciertamente no me encuentro tan atractiva como para estar buscando enamorarme de mi reflejo, quisiera más bien un otro verdadero.
La idea de 'media naranja', el deseo de encuentro, habla también de la limitación para ser un individuo al menos autosuficiente, o simplemente capaz de ser independiente y la necesidad para ser de tener una pareja. No es mi intención ser una mitad que no puede por sí sola, y relacionarme con un otro sólo con la finalidad de llenarme.
No tengo espacios que necesito 'llenar' en mi vida, prefiero tener cosas que compartir.
Además esta expresión ingenua, al menos en apariencia, no da lugar a los conflictos en una pareja, tampoco a las construcciones. Si es tu media naranja, todo va a ir bien, sin sobresaltos: como es deseable; pero si no lo es, habrá que seguir buscando, nada de valorar aspectos en los que el encuentro entre los dos mundos que suponen cada una de las personas fue más armónico, y desde ahí intentar encontrar un balance: es o no tu media naranja, son el uno para el otro, o no hay nada que hacer. Porque al parecer asomamos al mundo del amor con nuestro propio sistema de encastre determinado, y nos resta únicamente buscar (casi seguramente de forma infructuosa y frustrante) ese otro ser que tiene la misma muesca.
'El uno para el otro', simplemente una duda más ¿Somos siempre los mismos, como para encastrar siempre con el mismo otro?.
Si de una naranja de dos mitades, una de las partes cambia su forma, ya no encastran. Un otro en cambio puede ser capaz de acompañar.

jueves, 23 de febrero de 2012

La Paz





Uno de los tres lugares de los que más me costó irme...una cuidad capital diferente a la que conozco yo. Sólo por relatar algo, el día mismo que llegamos salimos a fumarnos un pucho con uno de mis compas, estábamos desesperados por ver y estar ahí. Caminamos pocas cuadras y nos encontramos con una mini plaza, un cuarto de manzana, en plena zona céntrica muy próximo a lo que sería un equivalente de Plaza de Mayo, allá se llama Plaza Murillo. Esta miniplaza de pronto comenzó a llenarse de gente, que así como si nada se concentraba en el centro...era una asamblea. Esta fue la segunda vez que dije, 'Estoy de viaje'.

Despidiendo Uyuni



miércoles, 22 de febrero de 2012





Ese día empecé a planear con otro delirante la siguiente etapa del viaje. Al salir eramos nueve en total, después llegó quien hasta el momento era un conocido de la facultad y se convertiría en mi compañero de andanzas. Ese día hablamos una posibilidad, parecía traído de los pelos, o al menos arriesgado porque no nos conocíamos en lo personal...no sabíamos si podíamos viajar y ser buenos complementándonos...pero sí nos dábamos cuenta de que algo de lo que esperábamos del viaje era parecido. Si los pibes querían seguir rápido a Perú, nosotros nos quedábamos solos.

Detalles de la feria en Uyuni






Detalles de la feria en Uyuni.
Llegamos de noche a la ciudad y el señor del hospedaje que nos fue a buscar a la estacíón de trenes nos dijo que al día siguiente, en la puerta del hostel, iba a haber feria...eso me invitó a salir temprano de la cama, aunque hacía días que no tenía una.
Cuando vi la calle me sentí un poco en mi casa, los puestos, el tránsito cortado, la gente...me recordó los domingos en Lanús queriendo ir con mi viejo, sólo por ir, ahí nomás de casa...y ahora de grande con mi hermano, que también quiere ir, parando en el único y siempre amado puesto de los juguetes a ver si algo se puede ligar. Pensé mucho cuando estaba recorriendo esa fila interminable de cosas, pensé qué es exactamente lo atractivo para mi de todo eso: creo que me gusta cuando hay mucho de algo, que difiere en colores o formas, y está todo junto...muchas telas, muchas lanas, muchos condimentos, muchos autitos, muchas personas, muchos puestos, una calle mucho más larga que en Lanús, o en la feria de frutas y verduras de La Plata.
Pensé además en que cuando voy los martes o los viernes a comprar comida no sólo hago mandados, también sé que me paso horas hablando con la familia que tiene la verdulería (que deben de estar agradecidos de mi vegetarianismo) sobre Bolivia, mis ganas de conocer su país, Evo, y todas esas cosas que me llenaron ese medio día en Uyuni cuando salí por el pasillo del hostel, con el pelo mojado y sin rumbo aparente.

lunes, 6 de febrero de 2012

Salen sapos y serpientes de mi boca
me tiemblan las hormigas
pico pincho perforo
me quedo animala
desnuda gruñendo haciendo muecas
rascándome la cabeza
sangrándome las lacrimales
y soy yo y mi madre y mi abuela
y soy todas y ninguna
quizá sea otra.


Rosa Chavez,
Venezuela.

Un regalo muy lindo, a mi en general no me gusta la poesía suelo ser muy quisquillosa, pero esta autora me encantó.
Gracias Juan.




























Ya en Bolivia en la ciudad de Uyuni, ver el FF.CC. y la feria me transportó a mi casa.
No fui al salar, a pesar de que ese es al parecer el gran atractivo del lugar...me fui a caminar por ahí.
La segunda tarde me acompañó Oki, seguimos la vía del tren y entramos a la estación por los talleres. Cuando ya estábamos en la zona del andén nos recibió el policía que estaba de turno, a pesar de todos los prejuicios que mi compa y yo tenemos nos pusimos a charlar: Un pibe joven, de nombre que no recuerdo pero simple como Juan o José o tal vez Jorge, estudiante de Leyes.
Nos habló de las limitaciones en la militancia que le imponen por ser policía, no puede agremiarse ni pertenecer a ningún partido político. Nos dijo que como fuerza responden a su jefe, y éste al estado, pero más allá de la inclinación hacia el gobierno no pueden demostrar preferencias de forma pública, no les corresponde.
Nos contó que entonces milita en el ámbito universitario.
Hablamos de leyes, Bolivia en tema de legislación creció mucho en los últimos años, cosas que se me ocurren fundamentales por lo menos en lo formal, allá son recientes: leyes que penen la discriminación, leyes de protección a la víctima de violación sexual, leyes que permitan a la mujer exigir al hombre el reconocimiento de su hijo (antes de esto, la mujer y el niño no tenían protección y podían ser negados por el padre sin problema ni condena social).
Hablamos mucho sobre discriminación y la conquista de derechos por parte de la mujer, la inclusión en nuevos roles...pero cuando nos estábamos yendo nos dijo algo que no esperábamos: el día anterior con la llegada del tren desde Villazón (en ese estábamos nosotros) unas turistas chilenas le habían dicho que un hombre vestido de azúl les había robado. Él encontró a un hombre y les preguntó si era él, las turistas dudaron pero le exigían que igualmente lo detuviera o al menos lo revisara. "Pero yo no puedo hacer eso. Es violencia policial, estaría avasallando los derechos del ciudadano. Así que les dije que no...se fueron insultándome." Finalmente el robo había sido intento, y tampoco al interior de la estación de trenes...
Salimos desencajados, fuera de lugar. Nosotros, incapaces de dirigirle la palabra a un cana por más de dos minutos, viendo en todos la violencia extrema, la represión, desconfiando con razón de sus superiores. Estábamos en otro mundo, con policías nuevos con otra formación desde la propia institución, que llevan en su brazo la Whipala y la bandera de Bolivia unidas...


El viaje fue largo, así que voy contando por partes...